Historias
Historias…. historias para no dormir, historias para reír, historias para contar, historias para guardar, historias tristes, historias alegres, historias con mensaje, historias….Ésta yo creo tiene un poco de todo. Me encuentro sentado, pensando y pensando y no encuentro salida. Algo me ahoga. Algo que me deja apenas respirar. Un sentimiento que aparece y se desvanece como el ir y venir de las olas contra un acantilado. Mi corazón conduce por la carretera sinuosa de un interminable camino de llanuras y cimas. Un camino que te lleva a la altura del cielo o la profundidad del infierno sin respetar ni situación ni momento. Está ahí y aparece. ¿Hasta cuando? Si tuviera esa respuesta quizás sería un poco más feliz. Quizás, imagino, aclararía algo. ¿Y qué? ¿Importa algo? Hasta la montaña más alta cae. Hasta el payaso más alegre llora. Hasta el rico a veces es pobre. Hasta el genio yerra. ¿Cómo puede ser tan frágil algo tan consolidado como el estado de ánimo? A veces se zarandea como si de un títere se tratase. Si no puedes ni controlar eso, si no puedes decidir en ciertos momentos… ¿de qué estamos hechos?
1 comentario:
Me gustaría decirte que efectivamente a veces no podemos controlar nuestros sentimientos, ni contradecirlos como quisieramos en muchas ocasiones, decir "no, no, yo no siento esto no quiero sentirlo, no quiero sufrir otra vez" pero cuando el corazón dice una cosa es así y necesita tiempo para curarse de un desengaño; esta mañana me he cruzado contigo cuando volvía del trabajo camino de casa y he visto el gesto de tu cara, a caballo entre rabia e impotencia,buscando una solución, una respuesta inexistente a una pregunta elíptica ¿cómo saber?,a veces preguntando, pero siempre hay alguien que no sabe responder o no responde lo que quisieramos oir,entonces buscas un resquicio de esperanza en tu corazón, no se sabe por qué, pero lo haces es un acto reflejo,el corazón nunca se rinde, solo acaba aceptando las circunstancias cuando son realmente obvias y aún así le cuesta porque nuestros sentimientos son salvajes y puros y no tienen dueño, son libres como el feroz viento de una tormenta que se choca con los ramas de los árboles rompiéndose, haciendo jirones su esencia solamente para expresar su pasión y su coraje, esa es la razón por la cual nos ocurre y no podemos controlarlos, solo esperar a que amainen y podamos continuar el camino sin que se haga jirones nuestro alma al chocarse con las ramas.
En mi opinión debes luchar por lo que quieres hasta el final con todas tus fuerzas y si no puedes conseguirlo esperar a que apacigue el temporal para seguir caminando.
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