Temet Nosce
Hace unos días fue mi cumpleaños. Nunca he sido de los que se alegran demasiado, aunque este año fue, por lo menos, divertido. Siempre pienso en lo rápido que pasa el tiempo, en qué poco me gusta cumplir años, en qué corta parece la vida. Mas este año, además, otro pensamiento me asaltó, como fiera paciente: qué poco me conozco a mi mismo. Entonces recordé la famosa frase que titula esta reflexión y que conocí por primera vez al ver la película "The Matrix". Conócete a tí mismo.

Es triste pasar por esta vida sin conocerse a sí mismo. De hecho, estoy convencido de que nadie se conoce a sí mismo por completo. Nadie conoce todos sus límites, todas sus capacidades, sus posibles reacciones, todos sus miedos. El conocimiento de uno mismo es la llave para la felicidad. Estoy convencido. Cierta persona que jamás olvidaré, me enseñó que es imposible amar a los demás sin amarse a sí mismo. Y no estoy hablando de egocentrismo, sino del conocimiento y aceptación del propio ser. Es imposible amar sin conocer.
Comprendo la imposibilidad del conocimiento absoluto, pero no por ello es una aventura inútil. Al contrario, es LA aventura. Y hay que ser muy valiente para emprenderla. La recompensa, sin embargo, creo que merece la pena.
2 comentarios:
Conocerse a uno mismo, difícil tarea. Uno siempre evoluciona y cambia, y todos los dias se aprenden cosas nuevas sobre nuestra `propia personalidad, pero quizá la posibilidad de conocerse perfectamente a uno mismo es imposible, a veces nuestras actitudes nos lo demuestran. Cosas que pensabamos q no haríamos jamás las acabamos haciendo. El ser humano es un ser voluble y heterogéneo y en ello está su atractivo principal. POdemos saber como somos pero existen lagunas en nuestra personalidad q se escapan de nuestro conocimiento.
Nunca llegamos a conocernos a nosotros mismos, nunca al 100%, no somos como pensamos, con el día a día, descubrimos cosas de nosotros que desconocíamos, que nos hacen pensar y actuar de cierta manera, que nunca antes hubieramos imaginado, quizás pq nos dejamos llevar por impulsos, por sensaciones, así somos realmente, pero no siempre nos dejamos llevar, tenemos barreras, sobre todo psicológicas que nos impiden ser como realmente somos y que nos imponen actuar sin dejarnos llevar y por eso nunca llegamos a conocernos, pq nos limitamos.
Pero no por eso, dejamos de ser felices, esos impulsos y esas sensaciones te hacen despertar, sentirte bien, ser feliz.
Publicar un comentario